sábado, junio 07, 2003
post-aereopuerto
Imaginerías distantes. Edificios que oscilan entre alamedas y estaciones de metro. Lugares que de lejos no existen o se vasn borrando (o los vas borrando o los voy borrando). Rutas temporales trazadas a paso apretado y anticipante, mapas creados del deseo entre collares rojos y libros y jugos y escaleras de piedra sin barandal. Ciudades que me guardo entre carne y hueso, autobúses y rabietas y choques y amaneceres sobre ejes de un solo sentido.Cuadros que se van yendo como agujas de pino navideño que barro a mitad de julio, como diamantina deslavada en una obra de arte de pre primaria
¿Consumir, o ser consumida?
Imaginerías distantes mal planeadas sobre terrenos en desnivel, entre portones viejos y baños cálidos y cubetas de agua.
¿Habrá hilo suficiente para mantener vías telefónicas con vasos de unicel?
Imaginerías distantes como astillitas enterradas contra realidades panorámicas como pequeñas pinzas.
Quito el dedo de la pausa.
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Imaginerías distantes. Edificios que oscilan entre alamedas y estaciones de metro. Lugares que de lejos no existen o se vasn borrando (o los vas borrando o los voy borrando). Rutas temporales trazadas a paso apretado y anticipante, mapas creados del deseo entre collares rojos y libros y jugos y escaleras de piedra sin barandal. Ciudades que me guardo entre carne y hueso, autobúses y rabietas y choques y amaneceres sobre ejes de un solo sentido.Cuadros que se van yendo como agujas de pino navideño que barro a mitad de julio, como diamantina deslavada en una obra de arte de pre primaria
¿Consumir, o ser consumida?
Imaginerías distantes mal planeadas sobre terrenos en desnivel, entre portones viejos y baños cálidos y cubetas de agua.
¿Habrá hilo suficiente para mantener vías telefónicas con vasos de unicel?
Imaginerías distantes como astillitas enterradas contra realidades panorámicas como pequeñas pinzas.
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