domingo, enero 19, 2003
Y la verdad traigo la mente en blanco. En total estado de espera a lo que ha de venir. Se siente bien rico.
Mi cerebro es un enorme tazón en donde alguien pretende hacer una sabrosa sopa de verduras pero en realidad se cocina un menjurje de no se qué mezclado con no se qué tanto....a veces sabe rico, pero otras de plano apesta.