domingo, enero 12, 2003

No es tanto que se pueda tener indignado al otro, sino que una tenga la coqueta desfachatez de ya no desearlo y siempre, siempre, poder alegar que fue porque ese otro en ningún momento se acercó.


Ahhh...pero eso si, la música y el baile estuvieron bieeeen suaves.
Comments: Publicar un comentario

<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?